UNA IDEA - UN RÍO

Esta es la historia de un pequeño cauce de deshielo que un día de a poquito fue surgiendo de entre las nieves eternas EN LA PRIMAVERA.

Al principio era muy débil y avanzaba como podía entre las escarpadas cumbres.

Con el aumento de la temperatura, el caudal también iba aumentando y como a esa altura el territorio estaba todavía muy empinado la fuerza de gravedad hacía de las suyas y el cauce iba tomando una velocidad vertiginosa. Meterse en ese río hubiese sido una hazaña bastante peligrosa y nada recomendable (además estaba helado).

Pero sin que nadie lo advirtiera, (ni él mismo) el río se iba enriqueciendo con minerales de los más variados, provenientes de los distintos suelos y orillas con los que se topaba, por los que pasaba y con los q a veces arrasaba.

A algunas orillas les limaba las asperezas y se formaban unas playas muy lindas pero que igual iban quedando atrás; a otras directamente las hacía desaparecer y ni indicios de ellas podían advertirse.

A veces el suelo y el ambiente se ponían muy secos y áridos y el caudal disminuía tanto que más q río quedaba un casi imperceptible hilo de agua plateada q se iba abriendo camino entre la tierra resquebrajada; pero igual seguía avanzando. Siempre.

O de repente se transformaba en cascada y se ponía muy vistoso, pero esto también duraba lo que un abrir y cerrar de ojos, porque el terreno enseguida se regularizaba y “lamentablemente” ya no había lugar para cascadas.

Y así seguía su recorrido cada vez surcando caminos q se hacían más llanos y aparentemente más predecibles. El paisaje a su alrededor también se iba haciendo más "armonioso": más plantas, más flores, más VIDA. Ya era poco probable encontrar una de las impresionantes rocas de puntas afiladas de más arriba. Todo se presentaba más cálido y tranquilo, aunque el caudal estaba más correntoso q nunca.

A esa altura el río ya era lo suficientemente profundo como para ser navegable.

Sus aguas tenían tantas propiedades que las gentes venían desde muy lejos a bañarse en ellas y los baños resultaban realmente revitalizantes.

Un día cualquiera, dio la “casualidad” de que se encontró en una CONFLUENCIA con otro río igual de caudaloso pero que venía de otras cumbres del lado opuesto de la cordillera. Otro río enriquecido con OTROS minerales distintos e igual de ricos que a lo largo de su camino había ido sorteando otros tantos accidentes geográficos hasta que el relieve y la fuerza de gravedad lo llevaron al mismo lugar que a nuestro pequeño río.

Que ya no era más pequeño.

Por eso ambos ríos confluyeron y uno le sumó al otro. Ninguno fué absorbido.

Y así, sumadas sus aguas siguieron su camino hasta formar un lago genial para desarrollar deportes náuticos y relajar.

Después de un rato, para no desbordar y expandir mejor sus aguas el lago decidió ramificarse en otros nuevos ríos que fueron tomando distintas direcciones hacia el mar.

Para esto el río y el lago siguen ocupándose de siempre ser muy abundantes y sobre todo constantes para tratar de q sus ramificaciones puedan seguir surcando sus recorridos y un día finalmente llegar al mar…o porqué no a alguna lagunita copada de por ahí.

Es el ciclo del agua! (o al menos la parte q se desarrolla sobre LA TIERRA)

¿QUERÉS CONFLUIR? OBVIO! ¿QUIÉN NO?

PERO ANTES TENÉS Q APRENDER A FLUIR, SI NO, NO VAS A LLEGAR A NINGÚN LADO O VAS A DESEMBOCAR EN UN RÍO QUE TE VA A ABSORBER HASTA Q NO SEPAS DE DÓNDE VENÍS NI HACIA DÓNDE VAS.

OCUPATE DE FLUIR QUE EL RELIEVE Y LA GRAVEDAD DESPUÉS DE QUE LOGRES ESO VAN A HACER LO DEMÁS.